Estaba previsto que con los salarios de abril se pagara un incremento del 5 por ciento. Sin embargo, por la emergencia fue diferido, sin fecha cierta de aplicación. El acuerdo salarial se había firmado a fines de marzo.
El gobierno de Juan Manuel Llamosas anunció en las últimas horas que no pagará el aumento salarial del 5 por ciento acordado a fines de marzo con los empleados municipales. El ajuste quedó suspendido por tiempo indefinido, hasta tanto la situación económica y financiera tienda a estabilizarse.
A fines de marzo, el Municipio firmó con Walter Carranza, secretario general del gremio, un acuerdo salarial que implicaba un aumento del 20 por ciento para contratados y empleados de planta permanente. Se aplicaría en tres tramos: uno del 10 por ciento -que se está pagando- y otros dos de cinco. El primero de esos dos tramos adicionales debía aplicarse con los sueldos de abril pero ahora, en el marco de la pandemia, quedó suspendido.
¿Cuándo se comenzaría a pagar? No hay fecha cierta. Tampoco se sabe qué pasará con el último tramo, previsto originalmente para junio.
El gobierno envió ayer una especie de resumen con las medidas económicas tomadas hasta el momento, como la extensión de la moratoria, el diferimiento de vencimientos impositivos, la reducción de los sueldos políticos. Dentro de ese resumen, en materia salarial rememoró que en el inicio de la crisis suspendió los incrementos salariales para los funcionarios y disminuyó un 15 por ciento los sueldos de los funcionarios para el mes de abril. Pero en ese resumen, el texto oficial incluía una novedad: “Diferimiento del incremento salarial del 5 por ciento previsto para abril al personal contratado y de planta permanente”.
Entre las medidas que el gobierno tomó desde el inicio de la cuarentena y que destaca en el texto enviado ayer están:
– El relanzamiento de la moratoria, con una ampliación de las facilidades de pago. Se incrementó de un 50 a un 75 por ciento la condonación de los intereses para los contribuyentes que paguen de contado sus deudas. Además se acotó al anticipo, que pasó del 20 al 10 por ciento, para acceder al beneficio en cuotas.
– La eliminación de los mínimos en las contribuciones de Comercio e Industria. Así, si un comercio no facturó, no tributará nada.
– La aplicación de una eximición parcial en las contribuciones que inciden sobre los automotores para los vehículos que se encuentren afectados por la falta de actividad.
- La eliminación de los intereses por pago fuera de término en los impuestos Inmobiliario y Automotor durante 60 días, aplicables a los meses de abril y mayo con posibilidad de prórroga.
– La modificación de la agenda de vencimientos; se fija como único vencimiento el último día hábil del mes de cada período fiscal.
– La suspensión de las caducidades masivas de los planes de pago.
– Un incremento del índice de contratación directa para insumos de Salud, que pasó de 45.000 a 300.000 pesos para cada compra.
– Eximición del pago de la contribución que incide sobre el Comercio, la Industria y las Empresas de Servicios, a las clínicas y sanatorios afectados a la atención de pacientes infectados con Covid-19.
El gobierno destaca en su comunicado que todas las medidas que se tomaron -incluso la decisión de suspender el pago del aumento salarial para los empleados de planta y los contratados- van a financiar el Fondo de Emergencia creado por la crisis sanitaria. Ese fondo ya tiene asignados, según la Secretaría de Economía, 11.718.000 pesos.
“Asimismo, el Fondo de Emergencia permitió la movilización del personal de la salud a sus espacios de trabajo en los transportes escolares, la entrega de 7.000 órdenes de compra de 1.000 pesos para garantizar la asistencia alimentaria, y el refuerzo de personal afectado a tareas de control, entre otras actividades. En ese contexto de emergencia, el gobierno de Río Cuarto sigue priorizando la salud de todos los riocuartenses”, se lee en el texto.