Los empresarios hoteleros de Villa Carlos Paz padecen una crítica y asfixiante situación económica ante la parálisis total de la actividad que viven desde el pasado 20 de marzo cuando se declaró el aislamiento social, preventivo y obligatorio y la exigencia de cerrar todos los establecimientos.
Esto implicó perder todas las reservas del fin de semana largo de marzo y sobre todo, el fracaso absoluto de Semana Santa, uno de los períodos de mayor afluencia anual de visitantes.
En función de la situación imperante en todo el país no sólo se da como potencialmente perdidas las vacaciones invernales de julio sino que además corre serio riesgo la temporada de turismo estudiantil, que todos los años genera la presencie en Carlos Paz de miles de alumnos primarios y secundarios de todo el país.
Entre setiembre y diciembre suelen llegar entre 70 y 100 mil chicos para disfrutar de Villa Carlos Paz, sus paisajes, entretenimientos y complejos recreativos.
Este movimiento genera anualmente centenares de millones de pesos en favor de las arcas de hoteles, empresarios gastronómicos, propietarios de negocios de artículos regionales, fábricas de alfajores, discotecas y locales de juegos electrónicos, dinero que ahora no llegaría obviamente.
Si las clases siguen sin habilitarse hasta agosto, es casi un hecho que los alumnos no tendrán días libres para vacacionar en el resto del año en sus tradicionales viajes de fin de curso.
Al ser Villa Carlos Paz, junto a Bariloche, Mar del Plata y Mendoza, uno de los destinos de turismo estudiantil más importantes del país, el sector sumaría otro elemento más que negativo en este 2020 que había comenzado muy bien en verano pero que ahora registra niveles dramáticos para la actividad, con serio riesgo del cierre de decenas de establecimientos hoteleros y gastronómicos y la pérdida consecuencia de puestos de trabajo.
Vía https://cordobainteriorinforma.com/
