Sería parte de una reasignación de los fondos aportados por la Provincia y que se presentaría hoy en la mesa de negociación. El gremio de Aoita adelantó ayer la propuesta. Mientras, sigue el paro por tiempo indeterminado.
“La severa crisis del transporte que atravesamos en Córdoba sólo se soluciona con más dinero”, sentenció hace unas semanas el presidente de Fetap, Enzo Noriega, cuando se le consultó por la salida al extenso conflicto que vive el servicio en la provincia. Transitados más de 40 días de parálisis en los interurbanos de hasta 60 kilómetros y en los urbanos del interior, la solución no estaría cerca de esa opción que esperaban en la cámara de empresarios. En cambio, lo que llegaría antes del mediodía de hoy a la mesa de negociaciones sería una redistribución de los recursos que aporta la Provincia vía subsidios. El mismo monto, pero con un reparto distinto.
Ayer, una parte adelantó el gremio de Aoita que mantiene el paro por tiempo indeterminado desde el 13 de abril y espera alguna opción para poner fin a esa medida. El sindicato de los choferes de colectivos señaló que “la Secretaría de Transporte definió una nueva distribución del subsidio provincial, lo cual generará una equidad en el sistema , vaticinó el sindicato que lidera Emiliano Gramajo.
Sin embargo, en el interior esa definición encendió las alarmas. Porque la redistribución no está en línea con lo apuntado por Noriega. Y lo que aseguraban ayer en Fetap era que se iban a tomar los fondos de las empresas que prestan servicios en las ciudades en el interior provincial para destinarlos a los interurbanos de más de 60 kilómetros bajo el argumento de tener un sistema más equitativo en el reparto de recursos. Sin embargo, esto llevaría a los servicios urbanos, como el de Río Cuarto, Villa María, San Francisco o Carlos Paz, a una profundización de la actual crisis por sumarles importantes recortes a sus ingresos.
Las primeras estimaciones señalaban que los urbanos del interior deberán recortar entonces un tercio de los actuales servicios, lo que implicaría también una afectación directa en las fuentes laborales.
En el sindicato eran ayer algo más optimistas con el nuevo esquema y aseguraban que con esto los empresarios en general iban a poder realizar “una propuesta real y concreta en la audiencia” que se realizará hoy. Esa propuesta que alude Aoita se refiere a los salarios adeudados.
Es que el sistema cayó a mediados de marzo en una espiral descendente que no se detuvo hasta desembocar un mes después en la huelga por tiempo indeterminado que implicó una parálisis total. A mediados de marzo, cuando se decidió frenar el dictado de clases en las aulas de todos los niveles educativos dejaron de viajar buena parte de los habituales pasajeros de colectivos y con ello comenzó el derrumbe en la recaudación de las empresas. Una semana más tarde, con el decreto de la cuarentena, los ómnibus empezaron a viajar casi vacíos y en los primeros días de abril las empresas anunciaron que no tenían fondos suficientes para pagar el 100% de los haberes. Las que más pagaron alcanzaron a cubrir el 70%, al igual que en abril. Por eso ahora Aoita espera una mejora de esos porcentajes y conocer qué ocurrirá con los salarios de mayo que deben abonarse antes de que finalice la próxima semana.
Fuentes de Fetap cuestionaban esa posibilidad al remarcar que se correría el problema de lugar y no se terminaría de solucionar un conflicto que, insisten, “requiere de sumar recursos y no reasignarlos dentro de un sistema desfinanciado”.
