El boxeador riocuartense dialogó con Magazzine Deportivo/FM Libre y dejó sus sensaciones tras defender el título sudamericano por segunda vez consecutiva (derrotó por KO técnico al santafecino Matías Galucci): “Estamos contentos. Siempre tratamos de afilar nuestras armas y no pensar en el rival. No desmerecemos, al contrario, Galucci es un gran boxeador, que venía con un gran récord”.
El pugilista local manifestó que en las únicas dos derrotas que tuvo en su carrera, posteriormente volvió con más fuerzas y que trabaja con su equipo para que eso no suceda y poder ver siempre las cosas positivas que van a llegar.
El 2022 no es un año sencillo para muchas personas y para Sasso no es excepción: “Es un año de mucho agotamiento, no solo en mí. Fue complicado para el grupo de trabajo y se notó el cansancio. Ahora, nos merecemos un descanso. Sabíamos que llegábamos de años de pandemia. Cuando se normalizó, llegamos con un desgaste importante. Lo noté en el equipo. Mi mayor motivación es la familia, nací y tenía unos guantes de boxeo. Quiero llegar a lo más alto, quiero ser campeón del mundo y nadie me va a quitar ese sueño”.
El entrevistado afirmó que no es fácil levantarse todos los días y no poder buscar a sus hijos al colegio: “Estoy todo el día sin ellos y cuando regreso, ya están durmiendo. Es grande el esfuerzo. Es una vida dura y es lo que más me pesa. Trabajo solo para ellos, como capitán del barco. Por eso, le intenté cambiar la cara al equipo y que lleguemos hasta el final. Con este triunfo demostré a la gente que estoy listo para un combate más grande. Estamos con un pie adentro. Quedó demostrado que estoy para grandes cosas”.