El Ministerio de Salud brinda recomendaciones para estar alerta a las posibles señales que puede dar una persona.
La cartera sanitaria cuenta con un programa específico para abordar esta problemática.
Además, participó en la organización del Congreso Internacional sobre conductas suicidas, realizado este viernes y sábado.
Cada 10 de septiembre se conmemora el Día Mundial para la Prevención del Suicidio, una fecha para sensibilizar acerca de esta problemática de salud mental. En este marco, el viernes y sábado pasados tuvo lugar el III Congreso Internacional sobre conductas suicidas y problemáticas asociadas, organizado por la Secretaría de Salud Mental de la cartera sanitaria y la Facultad de Psicología de la UNC y cuyo lema fue “Suicidio, de eso sí se habla”.
Durante la apertura del evento, María Pía Guidetti, secretaria de Salud Mental, expresó: “Este es un espacio para promover que el suicidio es un tema de toda la comunidad. Todos tenemos la posibilidad de percibir algo del orden del riesgo, que nos haga intervenir desde el lugar en que estemos. En la Provincia, el abordaje de esta problemática es una política de Estado, y contamos con un programa específico para ello».
Por su parte, Alejandra Rossi, vicedecana de la Facultad de Psicología agradeció la participación del Ministerio de Salud, a través de la secretaría de Salud Mental, en la organización del Congreso.
Además, expresó: expresó: “Creemos y somos unos abanderados de que la conducta suicida tiene que ser puesta en palabras como cualquier otro tipo de conducta relacionada al padecimiento subjetivo. Apostamos por su prevención, y lo que necesitamos es que cada uno de ustedes, luego de este Congreso, salga con la impronta de ser preventores”.
Sobre el suicidio
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el suicidio es la tercera causa de muerte entre los jóvenes de 20 a 24 años en las Américas; y las personas de 45 a 59 años tienen la tasa de suicidio más alta de la región, seguidas por las de 70 años o más.
Al hablar de suicidio, debe tenerse en cuenta que se trata de un acto que puede prevenirse y evitarse. Una persona que transita un proceso suicida puede dar múltiples señales de alerta, por lo que es necesario que los distintos actores sociales los conozcan para poder brindar ayuda.
Además, muchas veces se trata de un comportamiento motivado por situaciones transitorias, que con ayuda y acompañamiento pueden cambiar.
Se recomienda atender a comentarios que se relacionan con la muerte, manifestaciones de no querer vivir más y otros como verbalizaciones sobre sentirse un problema para las personas allegadas. Además, es muy importante hablar de la situación por la que está atravesando la persona, quizá esta resulta su única oportunidad para pedir ayuda.
En este sentido, es necesario que las personas allegadas –familiares, compañeros/as de trabajo, de estudio, de actividades sociales, deportivas, recreativas, y vínculos cercanos-, se animen a preguntar; buscar referentes de confianza; no juzgar ni retar; mantener una actitud empática y colaborativa; no subestimar la crisis por la que está atravesando la persona; acompañarla y persuadirla de buscar ayuda.
El equipo de especialistas del Programa Provincial de Prevención del Suicidio indica que hay determinados gestos, comportamientos y expresiones de personas que tal vez se encuentran en riesgo, que pueden ser señales de alarma:
- Aislamiento de las amistades, familiares y actividades regulares.
- Descuido inusual de la apariencia personal.
- Cambio notorio en la personalidad.
- Pérdida de interés en las actividades que hasta ese momento eran consideras placenteras.
- Decir que “uno” / “una” es un problema para los demás.
- Arreglar asuntos pendientes y regalar pertenencias.
- Tener alucinaciones o pensamientos extravagantes.
- Despedirse de personas queridas.
- Dificultad para comunicarse.
- Cambios en los hábitos alimenticios y de sueño.
- Percepción de una baja capacidad para resolver los problemas.
Para más información sobre prevención del suicidio, se puede acceder a este link.
Vale señalar que, ante una emergencia por una situación relacionada a esta problemática, se debe acudir a la guardia del centro de salud más cercano.
Programa Provincial de Prevención del Suicidio
El Programa Provincial de Prevención del Suicidio, perteneciente a la Secretaría de Salud Mental, aborda este tema de manera integral en todo el ámbito del territorio cordobés, generando espacios de reflexión y detectando el potencial suicida y los sucesos de vida estresantes en la población juvenil.
Asimismo, brinda talleres para el fortalecimiento de los factores protectores, propicia la formación de redes para el abordaje de la conducta suicida en el ámbito de cada comunidad, y acerca espacios de capacitación a todos los niveles de la población (fuerzas vivas, equipos de salud, docentes, entre otros).