Los planes contribuyen a mitigar el cambio climático, fortaleciendo el arraigo poblacional de comunidades indígenas y campesinas.
- En total, se destinan 600 mil dólares para los cuatro proyectos elegidos.
- Los planes fueron evaluados por el Consejo Consultivo Local.
La Secretaría de Ambiente, dependiente del Ministerio de Coordinación, presentó los proyectos cordobeses que contarán con el respaldo del Fondo Verde del Clima (FVC), un financiamiento internacional creado para apoyar los esfuerzos de los países en desarrollo, para responder al desafío del cambio climático.
El FVC fue creado en el año 2010, dentro de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático. Para acceder a esta financiación, Argentina presentó su estrategia nacional de reducción de emisiones por deforestación y degradación forestal (REDD+).
A partir de los resultados REDD+ del período 2014-2016, el país recibió un financiamiento de 82 millones de dólares.
Entre las categorías para postular los proyectos se encuentran los Planes Integrales Comunitarios (Pic), los Planes Institucionales de Prevención de Incendios, los Planes de Manejo de Bosque con ganadería integrada, y Programas de Mujeres Rurales, cuyo objetivo es valorizar el trabajo de las mujeres en el bosque nativo.
Planes Integrales Comunitarios
En esta oportunidad, se presentaron los proyectos elegidos que corresponden a la categoría de Planes Integrales Comunitarios, que apuntan a fortalecer el arraigo poblacional de comunidades indígenas y campesinas.
El monto total que se destina a los Planes Integrales Comunitarios es de 600 mil dólares.
Para la elección de los proyectos se tuvieron en cuenta diferentes criterios, entre los que se destacan: en primer lugar, se otorgó prioridad a aquellos planes que pertenezcan a pueblos que tradicionalmente han vivido en el bosque y que mantienen su condición de comunidades tradicionales.
Además, se consideraron los proyectos que se desarrollan en áreas con bosque nativo de mediano y alto valor de conservación, o que se trate de zonas cercanas a las áreas naturales protegidas.
Cabe destacar que el órgano encargado de evaluar y elegir los proyectos es el Consejo Consultivo Local, que está conformado por representantes de la Secretaría de Ambiente; el Ministerio de Agricultura y Ganadería de Córdoba; la Secretaría de Gestión de Riesgo Climático, Catástrofes y Protección Civil; el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA); el Movimiento Campesino de la provincia de Córdoba; el Consejo Provincial de Comunidades Indígenas y la Sociedad Rural Argentina.
Proyectos elegidos
El proyecto de Familias productoras del monte Santa Rosa apunta a fortalecer las economías locales, la gestión comunitaria de acceso al agua y la infraestructura de los espacios comunes de uso productivo, social, cultural y recreativo.
Se trata de 19 familias productoras que se dedican, en su mayoría, a la apicultura de monte, y la elaboración de productos medicinales, arropes, quesos de leche de cabras y artesanías. El financiamiento les permitirá mejorar la producción a través de la construcción de un depósito en la sala apícola comunitaria; la compra de un vehículo utilitario; la construcción de una cocina y baño en el salón vecinal; entre otras acciones.
San Tiburcio, del departamento Pocho, es un proyecto que se propone potenciar las principales actividades económicas que sustentan a las familias campesinas, a través de la compra de maquinaria y mejora en la infraestructura.
El proyecto La Cortadera, del departamento San Alberto, está compuesto por 37 familias. El objetivo principal del plan es mejorar el abastecimiento del agua, y fortalecer la cuenca lechera caprina. Para eso, utilizarán los fondos para implementar mejoras en la infraestructura de pozos para abastecer de agua potable a las familias, animales y huertas; colocar bombas solares y fortalecer los sistemas de acopios.
Por último, el proyecto “Unidos por el agua: Restauración del Bosque Serrano para un futuro sostenible del Paraje El Pantano”, está formado por once familias y tiene como objetivo principal la provisión sostenible del agua para todos los pobladores del paraje. El plan implica la adquisición de un tanque, la construcción de bio-depuradoras, la adecuación de techos y tanques domésticos, entre otras medidas para mejorar y ampliar la infraestructura existente.
Además, el proyecto prevé la generación de un “Centro Comunitario Modelo”, donde funcionará un vivero-escuela y un sector de huerta con hidroponía para la producción de verduras y plantines de árboles autóctonos, para la reforestación y restauración del bosque nativo.
