Condenaron por tentativa de femicidio al joven Juan Gabriel Herrera (19 años) que le dio veinte puñaladas a una chica en Banda Norte el año pasado. Le dieron 11 años.
La joven fue atacada con saña, a la salida del colegio, el 16 de junio de 2015, cerca de la medianoche, en la esquina de Marcelo T. de Alvear y Berutti de nuestra ciudad.
La familia de Melisa dice que se hizo justicia.
Las claves del primer fallo por femicidio -en grado de tentativa – en Río Cuarto
– “-El agresor- abordó a Melisa a la altura de la esquina exigiéndole que le diera un beso”.
– “El acoso se prolongó por alrededor de unos treinta metros, y ante la negativa de la joven a acceder a sus propósitos, sorpresivamente la tomó con sus manos de los cabellos y la tiró al suelo arrastrándola por la fuerza hacia el interior de un baldío”
– “Con ánimo homicida, por su sola condición de mujer, y con la intención de causar un mayor dolor y padecimiento, comenzar a golpearla con puños y pies”
– “Además, le asestó con el arma blanca que portaba veintidós heridas de diferentes “.
– “Hubo un plus deliberado de causar mayor dolor y sufrimiento a su víctima, como la propia Melisa lo interpretara y se lo hiciera saber a su madre al referirle “que la habían atacado por maldad…”””.
– “Su obrar responde a un estereotipo perfectamente delimitado, en el que la agresión devino hacia el sexo más débil exclusivamente por razón de género, por negarse la mujer a responder a las exigencias a las que por su sola condición de varón entendía que le correspondía»
– “La figura prescripta como delito de homicidio calificado por ensañamiento y en razón de género, en grado de tentativa”
El fiscal Jorge Medina y el defensor Jorge Valverde ya habían acordado de antemano ponerle un techo de once años a una condena que pudo ser más abultada.
En su alegato, el abogado querellante Miguel Martínez pidió 15 años, pero sabiendo de antemano que no encontraría eco en el tribunal. “Estoy de acuerdo con la calificación legal, pero no con el monto de la pena”, dijo.
Por el voto mayoritario, la Cámara Segunda del Crimen condenó a Herrera a 11 años de cárcel por el delito de tentativa de homicidio, agravada por ensañamiento y en razón de género.
Flotando en el ambiente quedó la sensación de que el caso pudo tener otro acusado. La madre de la víctima, Margarita Ledesma, dijo que no tenían pruebas de que el chico que quedó en la moto tuviera alguna responsabilidad, pero remarcó: “Pienso que él podría haber actuado para evitar lo que estaba haciendo su amigo”.