La actual head coach de Urú Cure representó a la Argentina en 3 olimpiadas y dejó sus impresiones. En diálogo con Magazzine Deportivo, habló de lo que significa estar en la máxima cita de deporte y la actualidad de los argentinos en Tokio 2020.
“Ya no me siento deportista olímpica, con el paso de los años se pierde. No dejo de tener la emoción a flor de piel por ver juegos 24/7”, dijo la cordobesa.
“Cuando era chica soñaba con jugar en la primera de mi club. Esperaba jugar con mis hermanas. Después fue todo paso a paso. Nunca imaginé estar en ese nivel por tantos años. Me emociona recordar todo lo que viví con las leonas”, afirmó la ex leona.
La entrenadora de la «Lechuza» no pudo elegir un Juego Olímpico de los que participó, dado que en todos vivió momentos especiales: «Sería injusta si tuviera que elegir un juego. Cada uno se vive de distintas formas. Sidney 2000 fue un viaje de estudios para mí, tenía cero responsabilidad y un enorme equipo detrás. En ese juego me enseñaron el camino y me educaron. En Atenas tenía otro rol y en Beijing, logré una madurez deportiva”.
“Mucha gente habla de mí y dice que tenía un gran talento de chica. Además de eso, colaboré en un montón de cosas. Tenes que estar dispuesta a una disciplina y otras cuestiones que no todos quieren afrontar”
Sobre la actualidad de Las Leonas, García dijo: “Me resulta difícil hablar y soy muy crítica. Conozco a las chicas y no son aprovechadas como deberían. Me gustaría ver más hockey y hoy veo atletas, son gustos. El deporte cambió. Me gusta el hockey asociado, jugué en Holanda y allí el juego es más asociado. Se nota en las chicas un equipo frustrado”.
“Viví un quiebre emocional en cada juego. Me toca ahora, sentada en el sillón. Hay un desahogo de los deportistas. La emoción está a flor de piel, cuando se prende la antorcha es el instante culmine”, cerró la «Sole» en diálogo con Magazzine Deportivo.